Determinación de la huella de carbono en la producción de fresas
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Editorial
Resumen
Trabajo Fin de Máster Universitario en Tecnología Ambiental (2022/23). Tutor: Dr. D. Pedro Palencia García. Las emisiones de gases de efecto invernadero han aumentado debido al desarrollo de la actividad humana. El aumento de estas emisiones está haciendo que suba la temperatura atmosférica de la tierra, causando el cambio climático. Para poder reducir estas emisiones de gases de efecto invernadero, el primer paso es cuantificarlas. El cálculo de la huella de carbono es una herramienta que nos ayuda a identificar las fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y la posibilidad de cuantificarlas. La guía que se ha seguido para calcular la huella de carbono de una organización es GHG Protocol. En este proyecto, se ha estimado la huella de carbono de la cooperativa S.C.A Santa María de la Rábida (Fresón de Palos), dedicada a la producción de frutos rojos en la provincia de Huelva. Además, se ha realizado el cálculo de la huella de carbono de los cultivos mayoritarios que se gestionan en la cooperativa, la fresa, el arándano y la frambuesa. En la huella de carbono de la cooperativa, se calcularon las emisiones para el año 2020 y 2021, con el objetivo de hacer una comparativa entre ambos años. La principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero es el consumo de energía eléctrica, en ambos años de estudio. Las emisiones de gases de efecto invernadero aumentaron desde el año 2020 al 2021. Sin embargo, el consumo de energía eléctrica se redujo. La razón por la que las emisiones son mayores, a pesar de haber reducido el gasto energético, se debe a un mayor factor mix eléctrico en el 2021. Un alto factor mix eléctrico nos indica una mayor emisión de gases de efecto invernadero en la obtención de esa energía eléctrica. Los resultados de la huella de carbono de los cultivos, durante la campaña 2020-2021, se expresaron en kg de CO2 equivalente por hectárea de cultivo y por kg de frutos recolectados. El cultivo de fresas presenta las emisiones de gases de efecto invernadero más bajas por kilogramo de fruta recolectada. En cuanto a las emisiones por hectárea cultivada, es el cultivo de frambuesas el que menos emite. El arándano es el cultivo que más impacto genera en la emisión de gases de efecto invernadero. La fuente de mayores emisiones de gases de efecto invernadero en los cultivos es el consumo de combustible. Se destaca el impacto del uso de fertilizantes nitrogenados en el cultivo de la fresa, responsable de casi la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero en este cultivo.
Trabajo Fin de Máster Universitario en Tecnología Ambiental (2022/23). Tutor: Dr. D. Pedro Palencia García. Las emisiones de gases de efecto invernadero han aumentado debido al desarrollo de la actividad humana. El aumento de estas emisiones está haciendo que suba la temperatura atmosférica de la tierra, causando el cambio climático. Para poder reducir estas emisiones de gases de efecto invernadero, el primer paso es cuantificarlas. El cálculo de la huella de carbono es una herramienta que nos ayuda a identificar las fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y la posibilidad de cuantificarlas. La guía que se ha seguido para calcular la huella de carbono de una organización es GHG Protocol. En este proyecto, se ha estimado la huella de carbono de la cooperativa S.C.A Santa María de la Rábida (Fresón de Palos), dedicada a la producción de frutos rojos en la provincia de Huelva. Además, se ha realizado el cálculo de la huella de carbono de los cultivos mayoritarios que se gestionan en la cooperativa, la fresa, el arándano y la frambuesa. En la huella de carbono de la cooperativa, se calcularon las emisiones para el año 2020 y 2021, con el objetivo de hacer una comparativa entre ambos años. La principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero es el consumo de energía eléctrica, en ambos años de estudio. Las emisiones de gases de efecto invernadero aumentaron desde el año 2020 al 2021. Sin embargo, el consumo de energía eléctrica se redujo. La razón por la que las emisiones son mayores, a pesar de haber reducido el gasto energético, se debe a un mayor factor mix eléctrico en el 2021. Un alto factor mix eléctrico nos indica una mayor emisión de gases de efecto invernadero en la obtención de esa energía eléctrica. Los resultados de la huella de carbono de los cultivos, durante la campaña 2020-2021, se expresaron en kg de CO2 equivalente por hectárea de cultivo y por kg de frutos recolectados. El cultivo de fresas presenta las emisiones de gases de efecto invernadero más bajas por kilogramo de fruta recolectada. En cuanto a las emisiones por hectárea cultivada, es el cultivo de frambuesas el que menos emite. El arándano es el cultivo que más impacto genera en la emisión de gases de efecto invernadero. La fuente de mayores emisiones de gases de efecto invernadero en los cultivos es el consumo de combustible. Se destaca el impacto del uso de fertilizantes nitrogenados en el cultivo de la fresa, responsable de casi la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero en este cultivo.